El tercer trimestre del embarazo es crucial para el buen desarrollo de nuestro parto y la mejor recuperación después de éste. El objetivo de este artículo es facilitaros información de cuándo, cómo y dónde recibir la mejor ayuda. El éxito de nuestro parto depende de varios factores, y en algunos sí podemos influir.

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Cada una de nosotras tiene una genética y anatomía diferente, que le va a facilitar o dificultar el momento del parto. Evidentemente en esto no lo podemos cambiar, va inherente a la condición de cada mujer. Sin embargo, en otros sí.

Factores en los que sí podemos influir y de los que somos directamente responsables:parto

  • Conocimiento del proceso de nacimiento de nuestro bebé.

La información es el mejor aliado, nos dará confianza y cierto control de la situación, porque sabremos que paso viene después del que ya hemos pasado.

Toda esta información nos la darán nuestras matronas en los centros de salud, en las “clases de preparación al parto”, a partir de la semana 28 de gestación.

  • Conocimiento y trabajo sobre nuestro suelo pélvico, la puerta de salida de nuestro bebé al mundo.

Aquí es donde entra en juego la labor del fisioterapeuta experto en suelo pélvico que se encargará de la preparación física al nacimiento.

pelvis

  • Semana 28-30 de gestación.

Breve explicación de la pelvis femenina y suelo pélvico, nos será de gran ayuda para entender los ejercicios.

Comenzarán indicándonos los ejercicios de flexibilización de la pelvis, con los que facilitaremos el descenso de nuestro bebé en el momento del parto. Estos ejercicios hemos de realizarlos diariamente en casa. No han de llevarnos mucho más de 15min, pues si no, es fácil que nos cansemos y terminemos por no hacer ninguno. Lo ideal es la constancia, cuanto más contantes seamos mejores resultados obtendremos.

  • Semana 32 de gestación.

Masaje del periné. Sería interesante que la embarazada acudiese a consulta con su pareja. Se les enseñará a los dos el masaje y el futuro papá lo realizará con la ayuda del fisioterapeuta, indicándole de este modo la fuerza que ha de realizar, sin desencadenar dolor a la mamá. Deberán realizarlo diariamente durante 5 min. Hasta el nacimiento del bebé.

  • Semana 36 de gestación.

Comenzaremos el trabajo con el epino, en consulta explicaremos a la mamá el funcionamiento de la sonda de presión, con la que pretendemos ir estirando la musculatura perineal poco a poco y sin dolor. Diariamente lo realizaran ellas en casa hasta la llega del bebé.

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  • De la semana 36-40 de gestación.

Enseñaremos a nuestra embarazada las mejores posiciones para la dilatación y las diferentes posiciones en el momento del parto, teniendo en cuenta que la decisión final de la posición de parto dependerá de cómo éste se vaya desarrollando.

  • Semana 38 de gestación.

A partir de este momento ya estamos preparadas para aprender con la ayuda del Epi-no la realización de los pujos, un buen empuje es más efectivo y menos lesivo para nuestro suelo pélvico.

 

Esperamos que esta información te sirva de ayuda, si tenéis cualquier duda ponte en contacto con nosotras y te ayudaremos.

 

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